Martes 13 de marzo, se destapa el Coronavirus oficialmente en todo el mundo.
El semestre acaba de empezar hace una semana, donde se dio comienzo a la materia más fundamental de la carrera: Diseño y producción de eventos de moda.
Para los que no conocen del rubro: esta materia es la puerta hacia el mundo laboral, en donde las estudiantes se dan a conocer por primera vez al mundo con su colección propia como diseñadoras.
La materia consiste en organizar una colección que se debe presentar en un evento de modas, todos estos años el evento transitado por las generaciones fue el formato de desfile que todos conocemos.
Acá es donde entra el problema; ¿cómo íbamos a hacer un desfile si nos acababan de decir por todos los medios de comunicación que el mundo estaba atravesando una pandemia mundial y había que encerrarse en sus casa o te podías contagiar de una enfermedad por tan solo respirar en un espacio público?
El pánico fue incontrolable, nosotras como alumnas y de parte de las autoridades no se reflejaban ninguna seguridad, ya que no se sabía que iba a pasar ni siquiera al día siguiente.
El desafío fue encontrar el formato correcto para mostrar estas colecciones que elaboramos desde nuestras casas.
No solo transitamos por el camino más turbio e incierto de nuestras carreras, sino que fuimos verdaderamente los primeros en enfrentarnos a esta realidad. No había referencias de cómo seguir adelante, no veías ejemplos ni motivación de cómo se podía sobrellevar esta situación en el mercado.
Buscábamos referencias por todos lados, escuchamos conferencias de los referentes del rubro pero nadie presentaba ninguna solución, era demasiado pronto, la pandemia apenas comenzaba.
Los desfiles de moda venían siendo por excelencia el formato de presentación de una colección para una marca. Pasaron a ser más que una pasarela, el desfile es un evento donde se vuelcan tanto conceptos como talentos, más allá de la indumentaria que se muestra. Se podría decir que son una expresión artística y una performance que involucra tanto al público que se convirtió en una herramienta de marketing por excelencia.
Esta fue una de las charlas que presentó Vogue a finales de julio con Alexandre de Betak, el director creativo más reconocido del rubro:
Después de largas semanas de investigar, desarrollar, cranear ya hasta llorar llegamos a diseñar un nuevo formato para presentar nuestras colecciones: una película de moda que se lanzaría en el autocine.
Vimos una oportunidad en la tendencia del momento: los medios digitales. Ahora todo era online, ya no había eventos presenciales de ningún tipo, ni ir a lo de tu abuela a almorzar, ni asistir a clase, ni ir al médico. Todo se vivía conectados mediante el mundo digital. Comenzaron a surgir nuevas necesidades y lo digital lo resolvía todo.
Cuando se vio que la pandemia se extendía cada vez más y las necesidades básicas ya estaban cubiertas (como la compra de supermercado online, las consultas médicas por video llamada) surgieron necesidades de ocio y entretenimiento. Las empresas se vieron forzadas a reinventarse ya que la gente necesitaba distraerse por momento y tratar de aislarse de la trágica realidad que estábamos viviendo aunque sea por un par de horas (como en la segunda guerra mundial, que irónico).
El cine fue una de las empresas que se vio forzada a reinventarse para sobrevivir, montaron el autocine, al estilo de los 90, una pantalla y vos y tu auto mirando una película. Un formato que fue muy bien aceptado por el público y que cumplía con todas las normas de sanidad.
El público cada vez se ponía más exigente y demandaba más contenido visual de parte de las marcas, ya no alcanzaba con una excelente campaña fotográfica, querían ver más. Fue en este momento cuando vimos la oportunidad de crear una película de moda, no solo un fashion film, que era lo que se suele hacer en el rubro, nosotras queríamos una película con una historia para contar.
El camino se iba iluminando cuando recibimos el apoyo y la participación de empresas que nos querían ayudar a hacer este proyecto posible. Ruta Visual fue una de estas empresas que confió en nuestra idea desde el primer momento y que se comprometió con nosotras para lograr el mejor producto posible, y así fue.
A continuación les dejo el corto: Nexo Atávico.
El evento fue sublime, sorprendió a todas las partes, la prensa estaba impactada como un grupo de jóvenes estudiantes había podido lograr un contenido de tan alta calidad y un evento tan innovador como contemporáneo.
El corto tuvo tanta repercusión en los medios que recientemente nos aceptaron para participar en el Espacio de Moda Viva con el corto de moda en Ixcel Moda2020. Se difundirá la película en la edición especial IxcelModa online los días 20, 21, 22 y 23 de octubre. les dejo la Web suscribanse y esperen atentos a esta transmisión.
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